Realizado en colaboración con los Archivos Frank Lloyd Wright de Taliesin, Arizona, esta colección no deja piedra por remover a la hora de examinar y rendir homenaje a la vida y la obra de Wright. Desde sus tempranas Casas de la Pradera (ejemplificada por la Casa Robie) hasta el concepto usoniano de hogar y los progresivos edificios de "arquitectura orgánica" o proyectos tardíos como el espiralado Museo Guggenheim de Nueva York y el desarrollo de su visión fantástica de un mañana mejor a través de su concepto de la ciudad viviente , todas las etapas de la carrera de Wright están aquí descritas e ilustradas en detalle. Este volumen, el Volumen 1, abarca los primeros años en Chicago y las Casas de la Pradera, el período que produjo una influencia profunda en los arquitectos europeos. La obra arquitectónica de Wright durante estos años tempranos fue principalmente residencial, así como lo sería a lo largo de su carrera, y desde sus trabajos iniciales Frank Lloyd Wright demostró un gran conocimiento y respeto por los materiales naturales. En los diez años entre 1896 y 1906 desarrolló y perfeccionó la así llamada "casa de la pradera". Wright creía que el arquitecto debía hacerse cargo por completo del diseño arquitectónico, lo cual significaba para él desde la decoración de los interiores hasta el paisaje exterior. No se le dio esta libertad a menudo, pero la residencia Avery Coonley de 1908 en Riverside, Illinois, es uno de los mejores ejemplos. Con el edificio administrativo de la Larkin Soap Company (1903-1905) y el Unity Temple (1905) pudo materializar encargos más grandes.