A partir de 1978, Humberto empezó a interesarse por otros temas además del retrato y uno de ellos fue el paisaje urbano. En el fondo, fuera cual fuera el género fotográfico que abordaba, la intención que subyacía en todas sus imágenes era la de un constante cuestionamiento de la realidad fotografiada, un intento de ir más allá de las apariencias, de sugerir mediante imágenes perfectamente construidas el desasosiego fruto del transcurso del tiempo, del desgaste, el misterio de los objetos inertes, de estructuras despojadas de su funcionalidad, así como de plasmar las huellas de las experiencias y de los acontecimientos. Para su trabajo Huellas también buscó y retrató los rastros de la Guerra Civil en Barcelona la fachada de la iglesia de Sant Felip Neri, el refugio antiaéreo construido en el barrio de El Poble-sec a los pies de Montjuïc , una forma de mantener viva la memoria, de rememorar ausencias y, al mismo tiempo, un alegato contra la violencia y las guerras.