En 1966, durante una breve temporada como recepcionista en la revista Town and Country, Linda Eastman consiguió un pase de prensa para un evento promocional muy exclusivo de los Rolling Stones a bordo de un yate en el río Hudson. Sus frescas fotografías espontáneas de la banda fueron muy superiores a las tomas formales realizadas por el fotógrafo oficial del grupo, lo que le abrió el camino al instante para hacerse un nombre propio como fotógrafa top del rock 'n' roll. El 11 de mayo de 1968, cuando su retrato de Eric Clapton fue publicado en la portada de Rolling Stone, entró en los libros de récords como la primera mujer en tener ese honor. Durante su período como la fotógrafa líder de la escena musical de los últimos años 1960, capturó en film a muchos de los músicos más importantes del rock, incluidos Aretha Franklin, Jimi Hendrix, Bob Dylan, Janis Joplin, Simon & Garfunkel, The Who, The Doors y los Grateful Dead. En 1967, Linda fue a Londres para documentar los "Swinging Sixties", donde conoció a Paul McCartney en el club Bag 'o Nails y posteriormente fotografió a los Beatles durante un evento para lanzar el álbum Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band. Paul y Linda se enamoraron, y se casaron el 12 de marzo de 1969. Durante las tres décadas siguientes, hasta su muerte prematura, se dedicó a su familia, el vegetarianismo, los derechos de los animales y la fotografía.Desde sus retratos tempranos de rock 'n' roll, pasando por los años finales de los Beatles o las giras con Wings, hasta la crianza de cuatro niños con Paul, Linda capturó todo su mundo en film. Sus fotos abarcan desde imágenes familiares espontáneas hasta sesiones de estudio con Stevie Wonder y Michael Jackson, así como a los artistas Willem de Kooning y Gilbert and George. Siempre fresca y sencilla, su obra exhibe una calidez y un sentido del instante preciso que capta la esencia de cualquier tema. Fuese fotografiando a sus hijos, a famosos, animales o un momento fugaz de la vida diaria, lo hacía sin pretensiones o artificios Este volumen retrospectivo una selección de su archivo de más de 200.000 imágenes ha sido producido en estrecha colaboración con Paul McCartney y sus hijos. Como tal, es un emotivo diario personal y un testamento perdurable del talento de Linda.