¿Sería usted capaz de resumir sus experiencias espirituales, sus lecturas al respecto, sus nclusiones sobre la muerte y sobre nuestro lugar en el mundo? ¿Sería capaz de valorar lo que las andes tradiciones de pensamiento han conseguido y también lo que han reprimido o dejado de do? Ese es el reto que ha asumido Luis Racionero con este libro sintético, un vademécum que se lverá imprescindible para cualquier persona con inquietudes y que es fruto del trabajo de toda una da dedicada al estudio de los textos más destacados de la humanidad y a la experimentación recta. Nuestro siglo hiperconectado necesita una nueva espiritualidad, más madura, que beba de las ortaciones del pasado, pero que reclame sin complejos su lugar en un mundo que se autolimita a material. La espiritualidad consiste en estar receptivo a la existencia del espíritu y no negarlo porque no ve ni se toca. Tampoco se ven las ondas electromagnéticas ni se tocan, y sólo se manifiestan ando se las introduce en una antena de radio o televisión. El espíritu es como las ondas de TV e salen de la emisora, y el cuerpo es como el aparato de televisión en casa, que las capta y las anifiesta .