Dulce herbario
Poesía e hierbas se complementan, y cada poeta tiene su herbario sentimental. Para elaborarlo, hay que recolectar las plantas con sumo cuidado:...
Leer más...
Poesía e hierbas se complementan, y cada poeta tiene su herbario sentimental. Para elaborarlo, hay que recolectar las plantas con sumo cuidado: como los sentimientos, las plantas deben estar completas. Por eso, mejor usar unas tijeras amorosas. En estas páginas encontrarás hierbas de la memoria, y de los afectos tiernos: el liquen es una vieja caricia, el helecho cama tierna; la seta es el duende misterioso de la vida, y el musgo caricia materna Y toda planta, además, contiene algún eficaz remedio. Es este un increíble viaje a la frondosa exuberancia de nuestro ser.
Autor@: Kruz Igerabide, Juan
Ilustrador@: Gutiérrez Serna, Mónica
ISBN: 978-84-124445-8-2
Idioma: Castellano
Lo tenemos. Envío en 48/72 horas (laborables - península)