<p <strong Carmen Posadas se embarca con Doña Emilia Pardo Bazán en una aventura detectivesca </strong </p <p En abril de 1912, la adinerada viuda de Peñasco tuvo un <b mal presentimiento</b mientras almorzaba en su palacete de Madrid. <b Algo les había pasado a su único hijo y su nuera</b , a quienes en ese momento creía en París, disfrutando de su luna de miel. La dama no se equivocaba: a pesar de las advertencias que les había hecho, <b los recién casados se habían embarcado en el que se creía el barco más seguro del mundo y sin duda era el más lujoso: El Titanic</b . Pocos días después las funestas nuevas llegaron a la mansión de la viuda: <b su hijo había perecido y su nuera estaba sana y salva</b , pero rota de dolor en Nueva York.</p <p Se pone en marcha así una intriga al más puro estilo <b Carmen Posadas</b , ambientada en el Madrid de principios de siglo y entre cuyo elenco destacan <b Emilia Pardo Bazán</b y uno de sus personajes ¿de ficción?, el dandy reconvertido en <b detective Ignacio Selva. </b </p <p <b Años después del hundimiento del Titanic</b , entra en contacto con Selva una dama adinerada de Avilés con una noticia insólita: <b su hermano, un indiano millonario que había sido dado por muerto en el naufragio,</b <b aparece</b en su mansión de La Habana para susto primero y alegría después de su viuda. Tras la sorpresa inicial, se despierta la sospecha en la familia. <b ¿Ha vuelto ese hombre de entre los muertos o no es más que un impostor?</b </p